El 8 de marzo es un día de reivindicación de derechos y lucha de los movimientos feministas. Actualmente durante la jornada se realiza el Paro Internacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans y No Binaries. En esta fecha te recomendamos tres lecturas para incursionar en diálogos actuales.
Por Redacción*
En el Día Internacional de la Mujer Trabajadora te compartimos algunas lecturas para repensar las discusiones actuales en torno a la brecha de género, la salud y la alimentación desde una perspectiva feminista.
En el texto «Las brechas de género en la economía existen: claves para entender por qué las mujeres ganan menos» la periodista Estefanía Santoro explica las tres brechas de género en la economía: laborales, de tiempo y cuidados, y salarial. Enfrentándose al discurso del presidente Javier Milei quién niega la existencia de brechas de género en la economía, y afirma que las mujeres ganan lo mismo que los hombres, la autora desmenuza las claves para comprender la desigualdad salarial.
La periodista e investigadora, Luciana Mignoli, desarrolla el cuestionamiento de las políticas de salud pública que plantean los movimientos feministas y las mujeres indígenas. En el dossier «¿Se puede construir una salud indígena y feminista?» destaca la importancia de comprender la salud como un proceso colectivo y complejo. Propone pensar la construcción de perspectivas sanitarias con enfoques de género e interculturales, con los desafíos que conlleva, y conformar un posible punto de partida.
Sobre la soberanía alimentaria, la socióloga Esther Vivas, investiga la evolución de los sistemas de producción y consumo de alimentos y la influencia de las políticas neoliberales que imponen la lógica capitalista en su producción y distribución. En el artículo «Soberanía alimentaria, una perspectiva feminista» analiza el impacto de estas políticas en las mujeres, especialmente en las campesinas, resaltando su papel fundamental en la producción y distribución de alimentos. Plantea la necesidad de una propuesta alternativa al modelo agrícola dominante que incorpore una perspectiva feminista, apoyada por movimientos sociales que promueven la soberanía alimentaria.
8M: Una fecha marcada por la fuerza de las mujeres trabajadoras
Esta jornada de lucha se origina en las protestas que llevaron a cabo, el 8 de marzo de 1908, las trabajadoras de la fabrica Cotton, de Nueva York. El reclamo apuntaba a la reducción de la jornada laboral a 10 horas y exigía un salario igual al que percibían los hombres que hacían las mismas tareas. Las trabajadoras textiles con el fin de mejorar sus condiciones laborales decidieron realizar una huelga con permanencia en su lugar de trabajo. El desenlace fue atroz, el dueño de la fabrica ordenó quemar las instalaciones llevándose la vida de 129 obreras.
Un año después, en 1910, se desarrolló la segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, en la capital danesa, Copenhague. El tema central fue el sufragio universal para todas las mujeres. Durante la conferencia y por moción de Clara Zetkin, se proclamó oficialmente el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, en homenaje a las mujeres caídas en la huelga de 1908. Luego, en 1977, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) designó oficialmente el 8 de marzo el Día Internacional de la Mujer.
Actualmente el 8M es un día de encuentro y reflexión, en donde se reivindican los derechos conquistados y las luchas de los movimientos feministas. Durante la jornada se realiza el Paro internacional de Mujeres Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans y No Binaries, con una fuerte adhesión a nivel mundial.
Fuente: cultura.gob.ar
Foto: Escritura Feminista – Comunicación interseccional