DOCUMENTAL, TESTIMONIOS Y MEMORIAS
Miradas sobre el pasado militante
De Gustavo Aprea ( Editorial Manantial, 2015)
Por Myriam Mohaded
El cine como constructor de la memoria social es el tópico central de este libro que reflexiona sobre los diferentes modos de evocación del pasado de los filmes que reconstruyen las militancias revolucionarias de los setenta, su represión y las consecuencias que generó en la sociedad. “Documental, testimonios y memorias” es el producto de una serie de investigaciones académicas realizadas por el doctor en Ciencias Sociales, Gustavo Aprea, en la Universidad General Sarmiento (UGS) y la Universidad de Buenos Aires (UBA) que culminaron con su tesis de doctorado.
En el regreso de la democracia, los documentales a través de la ficción realizaron sus primeras aproximaciones al tema. Recién en la década del ´90 juegan un rol más destacado de los debates sobre los acontecimientos traumáticos de nuestra historia reciente. En este contexto, los documentales de memoria empezaron a recuperar como tema los trabajos de militancia, con la impronta que se valora tanto lo que se recuerda como el acto de recordar. Los testimonios y sus representaciones juegan un rol central en las narrativas creadas.
En el análisis propuesto por Aprea se puede observar cómo se fueron transformando las diferentes memorias colectivas que participaron en diversas instancias de debate y los cambios que se fueron registrando del movimiento de documentalistas en Argentina. El libro trabaja sobe las relaciones entre un tipo especifico de documentales, los testimonios que aparecen en ellos y las transformaciones de las memorias sociales a lo largo de las dos últimas décadas en Argentina. Los ejes temáticos centrales que se abordan en esta exhausta investigación periodística, son: “El cine y la reconstrucción del pasado” (Historia), “Los documentales como constructores de la memoria social” (Discursos) y “Memorias estéticas y políticas” (Discusión).
Los documentales de memoria sobre la militancia revolucionaria setentista sostienen un efecto testimonial que los convierte en elementos significativos en el marco de las memorias sociales. También el autor involucra la lectura del pasado que pese a algunas coincidencias, se diferencian del trabajo historiográfico que implica una toma de distancia con los acontecimientos recordando que se diferencian de los testimonios y documentales.
La relación de pasado, presente y futuro es analizada por Aprea. Esto es, “el presentismo” como forma de historicidad contemporánea condiciona las diferentes maneras de lectura que hacen los documentales sobre el pasado reciente, al menos en dos dimensiones. En primer lugar, “porque basan la credibilidad en una experiencia vivida, donde la búsqueda de información sobre el pasado, con los testimonios de los testigos transmite las sensación de compartir una experiencia que se desarrollan al conjunto del documental. Por otra parte, “ese presentismo impide la certeza de un futuro cierto basado en algún tipo ideal de progreso que incide de diferentes formas en el modo en que los documentales de memoria sobre la experiencia revolucionaria y su derrota asumen las consecuencias efectivas o posibles de los hechos que recuerdan”
Al libro lo acompañan una serie de imágenes de filmes testimoniales que enriquecen el análisis. Y, en un apartado se complementa con las líneas del tiempo, una cronología de 1976- 2015 que permiten relacionar el lugar de los testimonios en la construcción de las memorias sociales en las manifestaciones audiovisuales y estéticas en conexión con las transformaciones que se producen en el contexto sociopolítico.
Documental, testimonios y Memorias es un trabajo necesario e imprescindible a la hora de profundizar los estudios de cine y memoria.