En el Centro Cultural Córdoba, el jueves 4 de noviembre a las 21 horas, se presenta en Córdoba la obra «Montada en la otra» o Una ilusión que no quería morir a la sombra, crónicas sonoras de Pedro Lemebel.
Por Redacción*
En el Mes del Orgullo, Córdoba Diversa, la Subsecretaría de Cultural Municipal y Agencia Córdoba Cultura, presentan la obra “Montada en la otra” O «Una ilusión que no quería morir a la sombra”, Crónicas Sonoras de Pedro Lemebel, con la interpretación y puesta en escena de Pano Navazo, del elenco riojano El Pasillo Teatro. La actividad será en el Centro Cultural Córdoba, Av. Poeta Lugones 401.
En esta propuesta, «El Pasillo Teatro» trae un puñado de Crónicas que reflejan tiempos y momentos de historias compartidas entre argentinos y chilenos; fotografías urbanas y barriales que desnudan prejuicios y desatan odio, y también, el desasosiego del sida y las desventuras del amor. Es un espectáculo estructurado alrededor de la obra y la personalidad del artista, escritor y performer chileno, Pedro Lemebel. En la presentación se busca acercar su universo, a través de sus crónicas y de pequeños retazos de su vida, que aparecen en videos breves que van interviniendo los relatos, con efectos sonoros y musicales.
Pedro Lemebel fue seguramente el único escritor chileno que se maquillaba y usaba zapatos de taco alto, al menos en público. Maquillaje y tacones fueron parte de la propuesta contestataria de este escritor, que de ser un niño pobre criado a orillas de un basural y un artista travestido que usaba la provocación como herramienta de denuncia política, pasó a ser uno de los autores chilenos más comentados y exitosos de Latinoamérica.
La primera vez que usó sus famosos tacones fue en 1986, en una reunión de los partidos de izquierda, donde el escritor leyó su manifiesto «Hablo por mi diferencia», ante una audiencia perpleja. En 1995 Lemebel publicó su primera colección de crónicas, “La esquina es mi corazón” y al año siguiente creó un programa en Radio Tierra, llamado «Cancionero», donde leía crónicas ambientadas con sonidos y música incidental. A partir de entonces comenzó a convertirse en un cronista urbano que husmeaba por los pliegues más oscuros de la vida cotidiana chilena. Sus crónicas mezclan lo barroco y lo marginal en un tono de provocación y resentimiento.
Participan en la producción, Candela Winter (Imagen y Sonido), Florencia Agüero (Iluminación) y Jimena Vera Psaró (Realización Objeto).